La redacción de artículos tiene muchos beneficios para tu negocio, si lo haces de manera periódica ya que la actualización constante de los contenidos escritos de tu web le indica a los buscadores que no eres un spam o un robot, por lo que poco a poco te va subiendo de posiciones y te da autoridad. Así te convertirás en referente de tu sector. Gracias a eso te ganarás la credibilidad de tu público y confiarán en ti y en que tu contenido resuelva sus dudas.
Crear contenido también da a entender que tienes mucha creatividad porque siempre tienes algo que contar, también refleja que dominas tu sector profesional. El tono y voz de tu marca se define mucho más y aumentan las posibilidades de que tu público encuentre mucha más información de tu empresa gracias al uso de palabras clave y, por tanto, va a favorecer la conexión con él.
Maider Tomasena: «El copywriting es tu primera conversación con tu cliente».
Lo que pasa que no es fácil crear contenido de valor a diario cuando tienes que dedicarte a trabajar otras partes del negocio. Tienes dos opciones: trabajar o actualizarte. Es como cuando tienes que ponerte al día con un tema y luego lo tienes que preparar, redactar y publicar. Es un trabajo que requiere tiempo. ¿Sabes cómo lo hago? Por bloques. Elige un grupo de diez temas, a ser posible que coincidan con fechas clave tanto de calendarios oficiales como de tu propia empresa (aniversarios, eventos especiales, etc).
También tienes que determinar la periodicidad con la que vas a publicar el contenido escrito. Para mí, es muy importante la parte organizativa porque te da una visión global del grueso del trabajo. Luego ya irás afinando.
¿Hablamos de copy?
Dice la copywriter Maider Tomasena (para mí una de las referentes en este sector): «El copywriting es tu primera conversación con tu cliente«.
Hay una cosa que debes tener clara y es que el copy no es solo texto. La parte escrita es solo una fase dentro de la construcción del copy. Por lo tanto, el copywriting es un método. Es una habilidad que se aprende. No hace falta escribir bien, para ser copywriter, ni todas las personas que escriben bien son copywriters. La persona que escribe bien puede ser un escritor o un periodista, pero no necesariamente tiene habilidades de copywriter. Recuerda siempre que, seas quien seas y te dediques a lo que te dediques, tienes un valor y debes trasmitirlo. Si no lo has descubierto todavía, indaga dentro de ti, trabájalo y descúbrelo porque lo tienes.
Todos lo tenemos. Esa es tu fortaleza y sobre la que tiene que girar todo lo demás. Ese valor es tu DNI, el cual, va a hacer que le des un tono a la comunicación de tu marca y, por tanto, a tu contenido escrito y audiovisual. ¿Te ha pasado alguna vez que has leído una carta o un mensaje de texto (me remonto años atrás) y has pensado «Esto no lo ha escrito esta persona»? Si conoces a la persona, cómo es, cómo piensa, cómo se comporta… tan solo con leer una nota, puedes identificar si viene o no de esa persona que tú conoces. Pues en la creación de contenidos pasa exactamente igual. Tienes un sello de identidad que se ve reflejado en el contenido escrito y que va más allá de las palabras. Veamos qué procedimiento puedes seguir para hacer un buen trabajo de copy.
Cuáles son las fases del copywriting
¿Cómo te beneficias con la creación de textos?
Cuando publicas contenido o le publicas el contenido a tus clientes, logras credibilidad, aunque a tu cliente le cueste creer que la publicación de contenido en blog funciona y piense que eres un gurú de la profesión.
Sí. Muchos clientes piensan que los profesionales del marketing les toman el pelo porque es un trabajo intangible del que no se perciben los resultados a corto plazo. El problema no es que no tengas resultados, sino que o tardan en llegar o, de repente, introducen técnicas y herramientas nuevas en el mercado y te toca actualizarte a una velocidad brutal para estar a la altura y no quedar mal con él. A ti te deja echo polvo porque te toca dividirte y si estás trabajando, no puedes actualizarte y si te estás actualizando, no puedes trabajar. Por lo que a veces necesitas una ayuda extra que te permita:
- Sentirte liberado, sobre todo, de la presión de tu cliente que quiere que le entregues la publicación «para ayer» y encima de una temática que no controlas. Son exigentes, a veces, y ni siquiera te dejan margen de error.
- Tener más tiempo. Para ti o para estar con quien quieras. Da igual. La cuestión es que el trabajo de copywriting (con todas sus fases) ya no te toca hacerlo a ti.
- No enfrentarte a la falta de cultura de marketing por parte de muchos clientes con los que a veces parece que hablas en otro idioma. Los clientes desconocen todo lo que se mueven en el marketing online. Quieren renovarse, pero su mente aún no está digitalizada y tardan más tiempo en asimilar los cambios de formatos. No pueden evitar pensar a la antigua usanza y las estrategias que se usan son diferentes. Tú tratas de explicárselo de mil maneras, pero nada. O no lo entienden o se cierran en banda a lo nuevo.